En medio de un duelo, Mash descubre la inesperada naturaleza de Lance, uno de los elegidos que posee dos cicatrices. Por si fuera poco, sale de un problema para adentrarse en otro: Adler, el dormitorio al que pertenece Mash, llevará a cabo una clase conjunta en exteriores con el dormitorio Lang. Es ahí cuando un sujeto peligroso le echa el ojo a Mash, y termina envuelto en una disputa por monedas y para defender el prestigio del dormitorio. Es hora de usar los puños de la justicia los supremacistas decadentes.